Bautizo de la novela póstuma "La mujer mora" (2004) del prof. Massimo Desiato (1961-2013)

Los invito a la presentación en La Forja de Las Letras “La mujer mora” (2004) el próximo 21 de junio. Sole nos abre las puertas de su librería para bautizar la única novela que dejó escrita el profesor italo-venezolano Massimo Desiato (1961-2013). Ha sido publicada por Grupo Tierra Trivium (Madrid) con el apoyo de Fides Banca Ética
Me acompañarán con mucho cariño y cercanía en la presentación la escritora, periodista, poeta e investigadora venezolana Lena Yau quien fuera alumna de Massimo en el postgrado de Comunicación Social de la UCAB y Albahaca Martin Gon por el Grupo Tierra Trivium. Con palabras del Director de la Cátedra Iberdrola de Ética Económica y Empresarial de la Universidad Pontificia de Comillas Dr. José Luis Fernández Fernández.
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Muchísimas gracias a mi querido alumno de sociología Universidad Catolica Andres Bello y excelente profesional Ricardo Rivas por la hermosísima foto de la portada y por todas las fotos de Caracas que se encuentran dentro de la novela que ilustran los lugares de la narración de "La mujer mora" que Massimo señala. 
Gracias igualmente a mi queridísima sobrina, estudiante del 5to. año de Psicología de la Universidad Catolica Andres Bello que con amor, responsabilidad y disciplina aceptó ser la modelo de la foto de la portada de la novela y de otras en el interior de la misma.

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Finalmente los dejo con un extracto de las palabras introductorias que he escrito para la novela: "Es un testimonio de vida que juega y se recrea entre la ficción y los contenidos reales de una historia de amor, de las historias de amores y de la apuesta del personaje principal a no renunciar al mismo. El agradecimiento a Venezuela tiñe cada una de las páginas de “La mujer mora” y es, también, un homenaje al país que le permitió conocerse, sentirse, crecer y vivir como ser humano. La crítica que realiza a la cultura venezolana la hace desde el más profundo amor que le unía a la tierra que le permitió cultivar y ejercer sus más grandes pasiones, a saber, la lectura, la escritura y entregar lo aprendido en un aula de clases. De modo tal que el análisis crítico no lo realiza para condenar enjuiciando a su Venezuela sino, más bien, lo realiza con el fin de iluminar todo aquello que consideraba negativo para nuestras relaciones producto de determinados códigos culturales que no favorecen la construcción de una afectividad plena entre nosotros. De igual forma, el agradecimiento a Venezuela lo hace en nombre de todos los inmigrantes que, como sus abuelos y padres, llegaron a una tierra desconocida y que, gracias a la generosidad y apertura de su gente, les permitió integrarse culturalmente, trabajar sin discriminación ni exclusión social alguna por nacionalidad, color de piel o sexo, rehacer sus vidas y la vida de todos sus familiares, inclusive, la de aquellos que se habían quedado en su tierra de origen que, en el caso de Massimo, era su también amada Italia"